Compuesto
por 100% Cabernet Sauvignon, la variedad más conocida del planeta, o el “rey de
los tintos”, el vino con más seguidores pero a su vez el más desafiante.
Origen: Maipo
Alto, precisamente en el límite de las comunas de San Bernardo, Puente Alto y La Pintana. Sin lugar a
dudas el mejor terroir del país para la cepa y uno de los mejores del mundo, de
este lugar nacen vinos imponentes, extraordinarias interpretaciones como son el
único icono chileno o 3 de las 5 etiquetas más caras Chile. Es que aquí tan linda
es la expresión de esta cautivante variedad que tan solo pensar en la conjunción
Maipo y Cabernet hace erizar los pelos de un buen tomador de
vino.
Hoy cercado
por un Santiago que avanza despiadadamente, el viñedo es parte del fundo “El
Mariscal”, otrora gran campo que aun se las arregla para resistir la presión
inmobiliaria cultivando estoicamente frutas de exportación y las ultimas 40 hectáreas de
Cabernet que no están en manos del innombrable gigante egoísta.
Conocemos
bien las parras, hemos seguido por años su comportamiento, su evolución y su
manera de madurar. Su suelo andino, regado de piedras redondas garantiza una
calidad de texturas incomparable y su especial microclima propicia una lenta
acumulación de sublimes aromas.
La fruta se
despalilló a mano y se fermentó en pequeños bins de 500 litros, sin
intervención de máquinas ni energía, solo a mano, todo firmemente artesanal. Luego
hizo su crianza en barricas francesas durante dos años, barricas que estaban en
el jardín, expuestas al ambiente algarrobino.
El vino
encanta con un color fabuloso, rojo moratado, profundo y oscuro. Luego ofrece
aromas preciosos a fruta roja fresca, a violetas (perfume escasísimo solo
presente en vinos de casta), a huesillos y obviamente la menta, fina y
elegante tan típica del Maipo Alto, también la madera está presente, entregando
sensaciones a humo, a vainilla, a manjar, a cuero, completando una compleja
sinfonía. En el paladar es redondo, grande, texturado, muy sabroso.
Sofisticado, fino, seductor, de taninos exquisitos, duraderos. Equilibrio
armonía y distinción, vino con alma, vino que dialoga, que se me muestra de a
poco, que conquista, encanta y conmueve.
Fue
envasado el invierno del 2013. Cualquiera de las 682 botellas producidas puede
consumirse desde ya o guardarse unos años, evolucionará magistralmente.
Recomendamos
compartirlo con carnes, cordero, lomo, filete. Asados o estofados, platos con
salsas o cremas. Pato, tierrinas y tapas. Quesos de vaca u oveja, maduros,
cremosos y secos.
NO en todos
los cines…
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